Buenas y malas noticias sobre las líneas de Nazca y Palpa
Acerca de los vientos de Ica, sus antiguos pobladores, sus gigantescas obras de arte y lo que sus tormentas (las de arena y las humanas) están haciendo con ellas, para bien y para mal.
Las zonas más áridas de los desiertos del sur medio peruano son ocasionalmente azotadas, entre los meses de julio y octubre, por fuertes vientos que, dada la sequedad de los suelos, ocasionan grandes tormentas de arena. Los pobladores locales les llaman paraca, una palabra de origen quechua que deriva de "para", que significa lluvia, y "aka", uno de cuyos significados es escoria, desperdicio, aunque también significa excremento... lo que revela que estas "lluvias de arena" no son recibidas con alegría por los habitantes de la región Ica.
Durante la segunda mitad del siglo XX para los arqueólogos quedó claro que otro antiguo pueblo de la zona, denominado "Nazca" (que tuvo su auge entre el 100 y el 800 de nuestra era y que tuvo un territorio más extenso que Paracas, abarcando toda la región de Ica) ecompartió muchas de las tradiciones de los primeros Paracas sólo que en un estadio más reciente de civilización. Un período intermedio entre ambos ha sido denominado arqueológicamente como Topará (anteriormente llamado Paracas Necrópolis). Y en efecto, es posible rastrear una clara continuidad en el arte y las costumbres de estas culturas que los diferencian de otras de los Andes Centrales. Todos practicaban deformaciones craneanas, eran extraordinarios tejedores y ceramistas y solían representar los mismos motivos en su arte, aunque el estilo y la técnica (una de las cosas que los diferencia) fue cambiando a través del tiempo.
Estos pueblos fueron los primeros peruanos en colocar a sus muertos "sentados" en canastas que luego eran recubiertas por decenas de capas de tejidos excepcionales (hicimos un reportaje sobre ellas aquí). Esa costumbre fue imitada posteriormente por otros pueblos de los Andes: Así durante el período Wari (de la región de Ayacucho, ubicada al final de esa ruta de intercambio costa-sierra que mencionábamos) la costumbre se extendió por todo el Perú (800-1000 d.C.) y luego gracias a los incas llegó hasta Ecuador por el norte y Argentina y Chile por el sur. (1450-1532)
Este es el valle de Palpa como se veía hace pocos años. En primer plano puede verse uno de los geoglifos más interesantes de la región
Y este es el panorama actual.
En los últimos años la aparición de nuevos asentamientos humanos en la zona (especialmente en el Valle de Palpa), la infame labor de las mafias de traficantes de tierras (que mediante argucias legales logran apropiarse de cualquier terreno) y la irresponsable y delictiva labor de la minería informal en zonas arqueológicas de Ingenio, Nazca y Palpa han puesto en gravísimo riesgo la preservación de los geoglifos mas cercanos a los valles.
Lo más triste es que incluso autoridades locales (algunos alcaldes) habrían respaldado algunas de las invasiones de terrenos en zonas arqueológicas (en busca de votos, por supuesto) como ha denunciado la procuraduría del Ministerio de Cultura (puede verse la nota de El Comercio sobre este tema aquí) .
El asunto legal
Pero el asunto no se puede resolver, como muchos creen, enviando a la fuerza pública a implementar desalojos. Es más complejo de lo que parece.
- Cobertura del diario La Opinión de Ica . Clic aquí
- Problemas para el registro del área cultural de Nazca (El Comercio) : Clic aquí
- Nota sobre las invasiones que tuvieron lugar en 2011 en Palpa (Peru21). clic aquí
Las playas desérticas de la península de Paracas. Foto tomada de la web perunascatours.com |
La península de los vientos
Pues bien, la mayor península de la costa sur peruana se encuentra en esa región y el hecho de ser la elevación más importante del Perú al borde de la costa ocasiona que los vientos paracas sean ahí muy frecuentes. Por eso se le llama así, Paracas. El lugar (en la provincia de Pisco), de suelos áridos, es conocido no sólo por la inmensa riqueza de sus aguas (una zona de cruce de corrientes) sino por tener una extraordinaria diversidad biológica de aves y mamíferos marinos, siendo posiblemente el único sitio del litoral peruano donde todavía es posible ver con regularidad al cóndor andino descender de la cordillera para refugiarse en las rocas junto al mar.
De hecho ello ocurre porque el cercano Valle de Pisco fue desde siempre una de las rutas naturales por las que la fauna cordillerana se movilizaba entre la sierra y la costa del Perú. Por ahí iban y venían las manadas de guanacos que los primeros peruanos cazaban hace 10mil años. Y es la ruta que las aves altoandinas (como el flamenco y el cóndor) siguen hasta el día de hoy para visitar el mar. En el transcurso de los siglos dejó de ser una ruta de caza para el hombre y se convirtió en una importante ruta de intercambio comercial entre la cuenca de Ayacucho y la Región de Ica.
De hecho ello ocurre porque el cercano Valle de Pisco fue desde siempre una de las rutas naturales por las que la fauna cordillerana se movilizaba entre la sierra y la costa del Perú. Por ahí iban y venían las manadas de guanacos que los primeros peruanos cazaban hace 10mil años. Y es la ruta que las aves altoandinas (como el flamenco y el cóndor) siguen hasta el día de hoy para visitar el mar. En el transcurso de los siglos dejó de ser una ruta de caza para el hombre y se convirtió en una importante ruta de intercambio comercial entre la cuenca de Ayacucho y la Región de Ica.
Fue en la península de Paracas que por primera vez se documentaron arqueológicamente las tumbas de los más antiguos tejedores de Ica, cuyos diseños de aves, mamíferos, peces y extraños hombres voladores (que llevan en sus manos cabezas cortadas, hachas y de cuyos cuerpos salen serpientes) son mundialmente famosos. Y por eso es que desde entonces se conoce como Paracas a la cultura de pescadores y agricultores que habitó la zona entre el 700 y el 400 a.C.
Durante la segunda mitad del siglo XX para los arqueólogos quedó claro que otro antiguo pueblo de la zona, denominado "Nazca" (que tuvo su auge entre el 100 y el 800 de nuestra era y que tuvo un territorio más extenso que Paracas, abarcando toda la región de Ica) ecompartió muchas de las tradiciones de los primeros Paracas sólo que en un estadio más reciente de civilización. Un período intermedio entre ambos ha sido denominado arqueológicamente como Topará (anteriormente llamado Paracas Necrópolis). Y en efecto, es posible rastrear una clara continuidad en el arte y las costumbres de estas culturas que los diferencian de otras de los Andes Centrales. Todos practicaban deformaciones craneanas, eran extraordinarios tejedores y ceramistas y solían representar los mismos motivos en su arte, aunque el estilo y la técnica (una de las cosas que los diferencia) fue cambiando a través del tiempo.
Estos pueblos fueron los primeros peruanos en colocar a sus muertos "sentados" en canastas que luego eran recubiertas por decenas de capas de tejidos excepcionales (hicimos un reportaje sobre ellas aquí). Esa costumbre fue imitada posteriormente por otros pueblos de los Andes: Así durante el período Wari (de la región de Ayacucho, ubicada al final de esa ruta de intercambio costa-sierra que mencionábamos) la costumbre se extendió por todo el Perú (800-1000 d.C.) y luego gracias a los incas llegó hasta Ecuador por el norte y Argentina y Chile por el sur. (1450-1532)
Constructores de geoglifos
Los Paracas, Topará y Nazca también fueron aficionados a hacer inmensos diseños sobre las planicies desérticas. Muchos de estos geoglifos han llegado hasta nuestros días y los conjuntos más grandes están en los valles de Palpa y Nazca, a varias decenas de kilómetros de las zonas costeras favoritas de los primeros paracas.
Los vientos destapan antiguos geoglifos
Pues bien, volvamos a los vientos. Hace pocos días se reportaron grandes paracas (los vientos) en la región de Ica. Los vientos llegaron a los 50km por hora y en algunos casos fue necesario suspender las clases escolares en algunos colegios, hubo algunos daños menores en la agricultura local, se tuvieron que cerrar algunos puertos pesqueros y un gran panel publicitario en pleno centro de la capital regional, Ica, se vino abajo. Pero salvo esos pequeños incidentes no hubo daños personales que lamentar.
Un panel publicitario fue derribado por los fuertes vientos en el centro de la capital regional, Ica. Foto : Diario La Opinión de Ica. |
A los pocos días Eduardo Herrán, un conocido piloto de aviones ligeros de Nazca y que ha descubierto varios geoglifos en los últimos años desde su aeronave, reveló a la prensa que los últimos vendavales "destaparon" geoglifos sobre el Valle de Ingenio en Nazca, que nunca antes habían sido visibles.
Se trata de un grupo de dibujos donde hay un ave, unas líneas en zigzag y un grupo de cuadrúpedos (este último diseño de unos 60x35 metros)
Una línea ondulada (arriba al centro) y el perfil de un ave (abajo a la derecha). Foto: El Comercio |
Adicionalmente se reportó una serpiente, de unos 60 metros de largo y 4 de ancho, según estimación del propio aviador.
La posible figura de una serpiente. Foto: El Comercio |
Estos diseños se hallan fuera del área protegida de las líneas, por lo que Herrán ha informado a las autoridades de las coordinadas de su ubicación en espera de que puedan ser investigadas arqueológicamente y protegidas
Si los vientos no borran las líneas es porque, como se sabe, han sido trazadas retirando las piedras piedras pequeñas que constituyen la capa superficial del suelo del desierto de Nazca, por lo que son visibles por simple contraste. La acumulación de polvo sobre los trazos, evidentemente, puede hacerlas invisibles pero parece que los últimos vientos más bien retiraron la arena acumulada superficialmente.
Pero, a diferencia de estas paracas, existen otras tormentas que sí constituyen una amenaza seria y real sobre los geoglifos...
Tormentas humanas en Palpa
Este es el valle de Palpa como se veía hace pocos años. En primer plano puede verse uno de los geoglifos más interesantes de la región
El llamado Reloj Solar de Palpa. Al fondo el valle de Palpa. Foto : Huacachinatours.com |
vista aérea de el "Reloj solar" y los asentamientos humanos cercando la zona arqueológica |
Y este es el panorama actual.
En los últimos años la aparición de nuevos asentamientos humanos en la zona (especialmente en el Valle de Palpa), la infame labor de las mafias de traficantes de tierras (que mediante argucias legales logran apropiarse de cualquier terreno) y la irresponsable y delictiva labor de la minería informal en zonas arqueológicas de Ingenio, Nazca y Palpa han puesto en gravísimo riesgo la preservación de los geoglifos mas cercanos a los valles.
La anterior es sólo una de las muchas fotos publicadas en julio por la Asociación Maria Reiche, (clic aquí, una campaña que vale la pena difundir) que han circulado con profusión en las redes sociales durante el mes de Julio, recopilando imágenes del maltrato sistemático que han recibido los geoglifos de Palpa y Nazca en los últimos años. Ante el revuelo provocado el Ministerio de Cultura informó recientemente (clic aquí) que están en curso, y a la espera de sentencia, diez procesos penales contra quienes han sido identificados como responsables de causar daños irreparables al patrimonio de la nación. Sin embargo las instalaciones siguen ahí...
El asunto legal
Pero el asunto no se puede resolver, como muchos creen, enviando a la fuerza pública a implementar desalojos. Es más complejo de lo que parece.
Para empezar la zona declarada Patrimonio de la Humanidad no incluye todos los geoglifos de los valles secos de la región, que están repartidos por diferentes sectores de las cuencas de los ríos Palpa, Ingenio, Grande y Nazca por lo que el área en peligro es gigantesca y virtualmente imposible de ser cercada o vigilada en toda su extensión.
Lo peor de todo es que NO EXISTE un inventario actualizado de todos los geoglifos por lo que no están inscritos en el Registro Nacional de Bienes Culturales. Eso los deja legalmente desprotegidas contra las invasiones de terrenos. En palabras del viceministro de cultura por esta carencia una vez que se produce la usurpación del terreno sólo se puede proceder legalmente con un proceso de desalojo que puede llevar hasta doce años (!!!). (Declaraciones aquí) .
Acciones en curso y pendientes
Se ha dispuesto el refuerzo de la vigilancia en la zona (para evitar nuevas invasiones) y se ha ordenado la actualización del Catastro Arqueológico para su inscripción en el Registro mencionado. ¿más vale tarde que nunca?
¿Se puede hacer algo más?
Desde estas páginas esperamos (¿ingenuamente?) que este asunto sea parte del debate en la actual campaña electoral de la Región Ica y pedimos a los pobladores de las provincias de Nazca y Palpa, a impulsar campañas de ámbito local para concientización de la población, a desalentar y denunciar las ofertas de los traficantes de tierras y que presionen a sus representantes en el congreso para emitir los dispositivos legales que permitan declarar medidas excepcionales para acelerar los procesos de desalojo, reubicación, clausura o expropiación necesarias para salvaguardar el patrimonio regional.
Desde estas páginas esperamos (¿ingenuamente?) que este asunto sea parte del debate en la actual campaña electoral de la Región Ica y pedimos a los pobladores de las provincias de Nazca y Palpa, a impulsar campañas de ámbito local para concientización de la población, a desalentar y denunciar las ofertas de los traficantes de tierras y que presionen a sus representantes en el congreso para emitir los dispositivos legales que permitan declarar medidas excepcionales para acelerar los procesos de desalojo, reubicación, clausura o expropiación necesarias para salvaguardar el patrimonio regional.
En cualquier caso creemos que la solución no puede ser pensada simplemente a corto plazo. Tratando de ser objetivos: Si para muchas personas subsistir es su preocupación más inmediata es poco probable que se sientan llamados a proteger este legado. Pero si se aplicaran estrategias que permitan a los pobladores locales beneficiarse del turismo de la zona de manera más directa, si ellos participaran directamente en el aprovechamiento responsable de estos recursos, no tenemos dudas de que se convertirían en sus guardianes más aguerridos, sus principales defensores, esos vigilantes que no permitirían que ninguna empresa minera, invasor de terreno, transportista irresponsable o saqueador deprede lo que es suyo.
Lo cierto es que mientras ello no ocurra estas tormentas provocadas por el hombre pueden terminar, en poco tiempo, con lo que las tormentas de arena no ha podido conseguir en los últimos 1500 años.
Más información
- Informes de prensa sobre los vientos en el sur del país
- Cobertura del diario La Opinión de Ica . Clic aquí
- Reportaje original sobre el descubrimiento de nuevos geoglifos, del periodista José Rosales, de El Comercio: Clic Aquí
- Notas sobre los graves problemas legales en torno a las líneas de Nazca
- Nota de prensa del Ministerio de Cultura sobre acciones en los geoglifos: Clic aquí
- Complicidad de autoridades en destrucción de geoglifos (El Comercio): Clic aquí- Problemas para el registro del área cultural de Nazca (El Comercio) : Clic aquí
- Nota sobre las invasiones que tuvieron lugar en 2011 en Palpa (Peru21). clic aquí
- Recomendamos seguir los posts del mes de julio de la Asociación Maria Reiche sobre la destrucción de geoglifos a través del tiempo . Clic aquí.
Pablo Chacón B.
www.antiguoperu.com
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